viernes, 31 de enero de 2014

Subida a la balseta de Cuarte y cresteo por el AVE 20 km

Resumen quincena 16-31 Enero de 2014.

Quincena raruna, alternando días de correr con buenas sensaciones y otros con malísimas. No sé si ha sido un medio catarrillo de esos que te roza pero no te da de lleno, sin fiebre, sin mocos, pero con muchos dolores musculares y sensación hasta de estar acalambrado sin haber hecho nada.
En mi favor tengo que decir que llevo 3 meses "sobrio", desenganchado de cualquier pastilla, ni condrosan, ni supradyn, nada de nada. Pienso que tampoco es bueno que sean medicaciones crónicas, por lo que en épocas de menos esfuerzo de km, intentaré tomarme descansos como estos.
Otra novedad de esta quincena es que he empezado a salir con Kike en días tranquilos con un grupo de madres del cole. La pega es que su ritmo es mas lento que el nuestro, la ventaja que te anima algo a salir cuando no apetece, por hacer un trotecillo suave.
"En resumiendo", el jueves 16 hacemos 7,9 km dando la vuelta a los Pinares de Venecia, ritmo de 6:15 m/km pero pulsaciones medias de 145, algo es algo. Al día siguiente hacemos unas series 4*400+4*200+4*100, sin forzar nada y esperando en alguna de ellas. La mejor de 400 a media de 4:13, la mejor de 200 a media de 3:40, y la mejor de 100 a 3:34 m/km.
Ese jueves y viernes por la noche me tocan sendas cenas con amigos, para hacer vida social, y aunque no nos excedemos mucho, pero la acumulación de dos seguidas, unido al viaje a Miedes hacen que me quede frío y coja el pequeño resfriado que he comentado. Así que a parar unos días.
Hasta el miércoles no se me pasa un poco el tema. El miércoles 22 salgo sólo a hacer algo corto y a probar, y ufff que mal. Al primer km ya unas ganas de pararme enormes, y pulsaciones de 165 de media, altísimas para además ir de trote tranquilo El catarro me ha dejado aplatanado. A duras penas completo 5 km y a casa, también hay que saber decir que no cuando tu cuerpo no está bien.
Al día siguiente salgo con Kike y ek grupo del cole y un poco mejor, hacemos un variado por los pinares, el cementerio y Puerto Venecia de 8,9 km, lentos pero mejor ya de pulsaciones.
El domingo 26 quedo con Juanfran tempranito y hacemos 9,6 km por el canal, pero otra vez duro duro, a 5:40 m/km se me disparan las pulsaciones a 167 de media. Se lo comento a Juanfran ya a mitad de trote y no me apura mucho. El martes 28 vuelvo a salir con Kike y el grupo del cole, esta vez tocan escaleras por el parque. Salen 6,2 km a ritmo tranquilo.
Me comenta Kike que si queremos hacer algo en la temporada tenemos que hacer una salida larga a la semana, cierto. Quedamos en hacer la primera el jueves 30. Yo no le digo nada, pero como me salga mal día igual le dejo sólo a los pocos km, ahora me veo muy irregular.

- Subida a la Balsa de Cuarte y cresteo por la zona del AVE y Pinares de Valdegurriana y Venecia 20 km
Tras dejar a los niños en el cole y con mas miedo que otra cosa, iniciamos la salida de conversación, sabiendo que esto será largo. Como hay cierzo, subimos por los Pinares hacia el Tiro de Bola, y cogemos dirección a la balseta por el camino mas expuesto, con el aire de lado y un poco a favor. En la última rampa se me va Kike un poco pero llegamos arriba en 45 minutos y paradita, gel y fotos. 
Ale, vuelta para abajo. Esta vez convenzo a Kike y en lugar de bajar hacia Valdeconsejo, bordeamos el vertedero por nuestra derecha hasta llegar a la zona del Ikea. Estos km de bajada salen rápidos, a 5 pelados, ritmos que hacia tiempo que no llevaba. Aquí yo creo que nos crecemos, llevamos 12 km y pico, buenas sensaciones, puá, que buenos somos. Pero antes de pasar bajo el marco que da acceso a Puerto Venecia, Kike me dice de alargar la salida por el lateral de la valla del AVE hacia Valdegurriana. Venga, que sí, son zonas de cresteos, pero así no lo hacemos aburrido. Las primeras subiditas las hago bien, pero nos tenemos que meter en un momento dado por enmedio de un sembrado, y luego ir pegaditos a la valla, por que los labriegos apuran hasta la misma verja, cualquier día la van a descabezar. La no senda se hace pesada, a pesar de que son mas metros de descenso que ascenso, pero hay rampas fuertes. Kike se va un poco por delante y creo que le voy frenando algo, pero me espera.
Tras 2 km duros, cogemos ya por un marco y pasamos bajo el AVE, girando hacia los pinares de Valdegurriana. Aquí comentamos que podemos bajar hasta el canal y subir dirección a casa (aburrido) o coger por debajo de Puerto Venecia e ir por pinar con sube-baja (entretenido)...por supuesto elegimos entretenido.
Por estos sube bajas llevamos ya 15 km y la cosa empieza a pesar, yo en las subidas sufro ya mucho. En un alto con un mirador frente al Corte Inglés de Puerto Venecia le pido a Kike una paradita de un minuto, la necesito. Aprovecho para tomarme mi segundo gel, y ahora ya viene casi todo cuesta abajo, así que allá vamos. Bajamos por el butano y la pasarela peatonal del tercer cinturón, y llegamos al parque grande completando 20 km en 1h55m. Muy buen entreno, por la poca confianza que tenía en hacerlo decentemente y por el cresteo final, que añade dureza al recorrido de subir y bajar a la balsa.
Quincena cerrada con 63 km, que unidos a los 61 de la primera hacer 124 km en Enero. Si cogemos la buena costumbre de hacer una salida larga a la semana, enseguida tendremos la forma necesaria para plantearnos qué retos afrontar con dorsal.

jueves, 16 de enero de 2014

Ruta por la Sierra Espigar 20,6 km

Resumen 1-15 Enero 2014.
Comenzamos el año en plena vorágine navideña, nochevieja en Herrera, año nuevo a Zaragoza, este año decidimos picarnos la visita a Jaca en tener menos días, y tras un par de días en Zaragoza poniendo lavadoras, nos subimos a Miedes a pasar los Reyes. 
Los primeros días en Zaragoza no salo a correr ya que tengo a mi mujer muy estudiosa, así que me quedo con la casa y los niños para que ella pueda avanzar, pero al subir a Miedes ya pienso en recuperar el día perdido.

- Ruta por la Sierra Espigar 20,6 km: 
En la web de senderos de la comarca de Calatayud, hace tiempo que he descubierto varias rutas que salen de Miedes, por lo que hay que ir probándolas. la ruta PR-Z-94 tramo 1 es una circular de 14 km desde Miedes al refugio de Ruesca y volver por Valdemuñón que ya he recorrido y comentado aquí varias veces. Esta ruta PR-Z-94 tiene un tramo 2 que es una ruta circular desde Ruesca también sobre 14 km, por lo que sumados a ir y volver a Miedes, salen 20 km aproximadamente. Sé que no estoy preparado ni mucho menos para hacer esta ruta, pero ¿qué sería del corredor popular si nunca se aventurase a hacer mas de lo que puede?.
Así que nada, riñonera con agua y dos geles, ropa la justa en un día de invierno templado, a "palante", lo que no se pueda correr, ya se andará....
La ruta seguida sale de Miedes hacia el norte, por un camino asfaltado que lleva a Ruesca pasando varias vaguadas suaves. En Ruesca cruzamos la rambla, y tomamos dirección Este por un camino paralelo que va ganando poco a poco altura. Es de esos falsos llanos para la vista pero no para las piernas, que notan que eso pica. Por el tercer barrando que viene desde la izquierda, subimos, ahora ya si con mas desnivel, pasamos por una granja y nos adentramos en la zona de pinar de la Sierra Espigar por caminos de todoterreno con fuerte desnivel. Toda esta zona ya la realizo andando, que esto es muy largo. A los 7 km desde la salida, y tras ascender 200 m en los últimos 2 km, llegamos al refugio de Ruesca, caseta forestal que se sitúa en la intersección de la llamada "Ruta de los contrabandistas", que no es mas que un camino que recorría la Sierra Espigar de lado a lado y que servía para el intercambio de mercancías y el extraperlo entre los pueblos de Miedes, Ruesca, Orera, Tobed, etc.
Otras veces me había costado desde Miedes hasta aquí 44 o 45 minutos, hoy 52... es lo que hay. Aquí hago una breve paradita, foto del camino por donde vengo, gel y a seguir.
Por el sur amenazan nubes muy negras que anuncian lluvia, pero gracias a las webs meteorológicas sabía que tenía una ventana de buen tiempo hasta cerca de mediodía, podía llover pero no mucho, así que ha aprovecharlo. (Luego a las 4 de la tarde cayó una buena granizada con viento en Miedes, con vientos de 130 km/h registrados en Calatayud, cumpliendo las previsiones, así que sí que era bueno el frente...).
Desde este punto, siempre había tomado el camino dirección sureste, para hacer rutas circulares hacia Valdeliebre y Valdemuñon para volver luego a Miedes. Hoy tocaba explorar el camino hacia el otro lado. Lo que en principio parecían falsos llanos del camino en los mapas, resultaron no ser nada llanos, el camino iba subiendo y bajando, cogiendo las cabeceras de varios barrancos (Valdepinar, Erías, Umbría, Murciano) de donde partían caminos que descendían primero hacia Ruesca y luego hacia Orera. Bueno, pues para hacer esta ruta marcada hay que ir siguiendo el camino que con altibajos va recorriendo de sur a norte la Sierra Espigar. Estos tramos se me atragantan bastante, mas que nada porque los esperaba mas llanitos y poder coger ritmo trotón, y hay tramos que tengo que volver a "echar el pie a tierra" y andar.
Desde aquí, no se ve muy nítido en la foto, se contempla todo del valle del Perejiles, con Orera en primer término y Mara a lo lejos, y con los campos blancos que corresponden a la explotación minera de sepiolita de Orera. Que sepáis que si tenéis gato en casa y "arena de gato" o "cama de gato", muy probablemente ese material absorbente procede de esta cantera, que es o era la de mayor producción de Europa.
Así china chano llegamos al refugio de Orera, hito que nos marca poco a poco el comienzo del terreno favorable. En un momento dado llegamos a un cruce con un desvío donde girando casi 180º iniciamos ya el verdadero descenso hacia Orera. Si siguiéramos de frente, perderíamos altura poco a poco hasta llegar a un barranco, teniendo Viver de Vicort enfrente en altura, que sería un poco la barrera natural de distinción entre la Sierra Vicort y la Sierra Espigar.
Bajamos por los parajes de la Hoya de la Rebullosa y el Camino del Pinar hacia Orera, ahora si pudiendo trotar a gusto, en terreno favorable, pero con dolor de piernas por tener que ir frenando la pronunciada pendiente. Me como una barrita de cereales, porque meterme otro gel no me apetece a estas alturas de año, y vamos llegando a Orera.
Como se oyen varios perros a lo lejos, pues nada, pedrusco en la mano y palante, que lo que huelen es el miedo. Atravesamos Orera e iniciamos una brusca subida que separa esta población de la de Ruesca. Sólo distan 2 km, pero están cada uno encajadas en el fondo de su valle. Toda de nuevo andar un trozo, y desde arriba saco una bonita foto de la Sierra Vicort donde se ve Orera a la izquierda, enmedio enfrente Viver escondido en una vaguada, y desde la derecha sería el Camino del Pinar por donde hemos bajado desde la Sierra Espigar hacia Orera.
Aquí comienzan a caer unas gotas, mas por el fuerte aire de frente que viene desde el sur que porque llueva en sí, pero hay que aligerar no nos pille el tema. Hasta aquí tenía bien elegida la ruta, ya que daban aires fuertes del suroeste y había ido la mayor parte del recorrido protegido o a favor. Pero como en todo recorrido circular, alguna vez te tiene que tocar volver.
Llego a Ruesca de nuevo en descenso, breve parada en la fuente a llenar agua, y rapidito a volver a Miedes, que el aire cada vez sopla mas fuerte. Estos últimos km de vaguadas con el aire de frente y viniendo gotillas de agua se hacen duros... llevo 20 km cuando a estas alturas no estoy preparado ni para 10, ¡cómo no se me van a hacer duros!.
Finalizo la ruta con 20,6 km en 2h17m y 500 m D+. Cansado no, hecho polvo, pero cuando no se puede correr pues hay que sufrir cual perro.


Bueno, por fin acabamos el periplo navideño, y tras Reyes vuelta a casa, 5 o 6 lavadoras en un día, y rutina de cole, etc. Me propongo ya firmemente correr 3 días a la semana, pero la circunstancia que voy viendo es que ahora tengo casi mas tiempo libre para correr entre semana que el fin de semana, igual tengo que variar la rutina del 95 % de los corredores y hacer las tiradas largas entre semana y dedicar mas el finde a la familia. Bueno, el martes 7 hago 7 km al ritmo cochinero de "cinco cuarenta y pico". Uff, al pasar por la báscula tras las navidades casi me da algo, no me atrevo ni a comentar los kg que he cogido desde la maratón. A ver si me pongo la cremallera en la boca, no hay otra opción.
Además, me noto pesado, con el mismo esfuerzo de hace un año voy como 20 o 30 segundos mas lento. Me estará pasando factura la maratón, me estoy volviendo viejo...?.
El Jueves 9 hago otros 7 km, pero esta vez a 5:10 m/km en progresión, acabando los últimos por debajo de 5 m/km. Nada del otro mundo, pero necesitaba un entreno algo mas rápido que mis "cinco cuarentas". El sábado 11 un rodaje de 8,2 km a 5:25 m/km, y a dedicarle tiempo a la familia, ese bien tan preciado y a veces poco valorado. Para acabar la quincena, el lunes 13 estiro un poco mas la salida hasta los 10,1 km, pero volviendo a mi ritmo trotón, y el miércoles 15 rodaje de 8 km mas suelto que el día anterior. Cerramos quincena con 61 km y sin objetivos a la vista: Carrera del Ebro, Media de Sabiñánigo, Media de Calatayud, KDRTrail, Media de Zaragoza... ya iremos viendo, para qué nos vamos a agobiar...sólo es correr por correr.

martes, 14 de enero de 2014

Balance de 2013

2013 ha sido un año agridulce. Malo en lo laboral, por el contrario me ha permitido tener tiempo para prepararme diferentes carreras a lo largo del año. 
Como objetivos de esta temporada hubo dos muy claros. En primavera el trail largo de la Carrera del Ebro, y en verano-otoño la Maratón de Zaragoza, corriendo también en Mayo la Media, con lo que este año puede decirse que me he centrado en probablemente las tres carreras de referencia en Zaragoza capital en media-larga distancia.
Empezamos Enero con entrenos día si - día no, haciendo alguna salida de 14 km para ir cogiendo fondo, y en Febrero, ya con la carrera a la vista, pocos entrenos debido a dolores en la rodilla, pero metiendo dos tiradas de 20 km en semanas consecutivas, para llegar a la carrera con el mayor fondo posible. Así nos plantamos en marzo en el trail de la Carrera del Ebro de 30 km, con preparación muy justa para poder acabar dignamente, con dolores y sin poder completar mínimamente el planning que tenía en la cabeza, pero bueno, se corrió. El resto de Marzo y Abril lo pasamos con las salidas justas y tiradas de 14 km pensando en llegar a la media, pero sin hacer series ni salidas a ritmo alto, por lo que únicamente pretendiendo hacer un digno papel con la inercia del entreno. Tenía en la cabeza correr la Media de Calatayud a mitad de Abril como preparación, pero la muerte de mi tía Pili hizo que no tuviera ganas de ello. Probé en el crucero un par de días a correr en cinta, 11-12 km, sólo por no perder la forma. Destacar en este mes una salida muy bonita de hice por jaca Ipas y Bergosa, de la cual realicé una entrada. En Mayo vino la Media Maratón de Zaragoza, que con la inercia y poco mas hicimos un digno papel, para no haberla preparado específicamente en absoluto. Viéndolo a toro pasado, en el mes último antes de la media sólo hice la salida larga de Jaca, 3 semanas antes.
Tras la media, me enganché con Dani y Kike a hacer salidas casi diarias cortitas, y me llevaron a varias tiradas espectaculares por la zona de la plana de María, Barranco de las Almunias, etc, las cuales comenté en su momento en este blog. Aquí si que hacia mínimo una salida de 15 o mas km a la semana. Memorable la frase de Dani: "Si no te lesionas, te pondrás fuerte". Y sí, iba acumulando km tanto corriendo como en bici a ritmos buenos. En Julio comencé a alternar un poco el correr con la bici, para darle descanso a las rodillas. Subiendo a Herrera un par de días y haciendo una salida en bici y otra corriendo, me entró una fuerte gastroenteritis, golpe de calor, o lo que fuera, lo que hizo que flojara un poco el tema, igual me había pasado de rosca. Ahí, en la segunda quincena de Julio y primera de Agosto, me dediqué a hacer salidas cortas, e incluso senderismo con un grupo de la playa, pero yo ya tenía en la cabeza desde el inicio de Junio una sola cosa: La Maratón de Zaragoza del 29 de Septiembre, esa carrera que siempre lleva en mente todo corredor popular y que nunca se acaba de ver claro cuando es el momento de dar el salto a ella.
Sobre el 10 de Agosto me decidí a hablar "públicamente" del tema. Sólo con 7 semanas de planning específico, me lancé a afinar la preparación. Bien es verdad que la "base" de Mayo, Junio y mitad de Julio era muy buena y variada, y esa variedad junto con el relativo descanso de la segunda quincena de Julio e inicios de Agosto puede que fuera incluso ideal para no estar 3 o 4 meses física y mentalmente centrado en el planning, que se hubieran hecho mucho mas duros. Cogí el planning sub 4 horas de la web zaragozamaraton y lo seguí al pié de la letra en pulsaciones, haciendo siempre mas km y ritmos mas altos de los recomendados. Las piernas, con los cuidados necesarios, aguantaron la carga de trabajo, y el resultado fue un 4h06m que te deja exultante, dentro siempre de tus limitaciones como corredor.
Tras la maratón llegó la bajada de km y el parón necesario física y psicológicamente, para acabar el año sin retos a la vista y rodando casi sólo por inercia y para no echar barriga.
km
Enero 119
Febrero 105
Marzo 122
Abril 114
Mayo 135
Junio 162
Julio 112
Agosto 190
Septiembre 246
Octubre 68
Noviembre 27
Diciembre 79
Por lo que se ve, el año ha dado para 1.479 km de running, muy heterogéneamente distribuidos, 156 km de senderismo o "andar a ritmo vivo", y 395 km de BTT. Son números sólo ligeramente inferiores al año anterior, apenas 50 km mas de running, otros tantos de BTT, y sí que aparece eso nuevo que me he inventado que es "andar a ritmo vivo", que utilizo los días que las patas duelen para hacer rutas olvidándome un poco del reloj, pero haciendo trabajo cardiovascular.

jueves, 9 de enero de 2014

Rutas senderistas en Tavernes de la Valldigna

Voy a hacer una entrada específica para explicar un par de rutas que he realizado por el Alto de las tres cruces de Tavernes de la Valldigna y alrededores. 
El recorrido que realicé ahora en Diciembre corresponde al PR-CV 38, pero está imbricado con los PR-CV 39 y PR-CV 40, de forma que puedes realizar el itinerario con cualquiera de las variantes descritas. En este planito se ve el recorrido de forma somera, sus lugares de interés y sus posibles variantes:
El día 29 de Diciembre me acerqué con el coche para hacer la subida por la Senda de los Amoladores, que había visto como subía la ladera serpenteante desde el otro lado del valle en una salida realizada en el verano. Como no sabía donde comenzaba la senda, atravesé la población de Tavernes y dejé el coche en los últimos bloques de pisos, desde donde se ve perfectamente toda la zona a subir.
Tras perderme un par de veces en los primeros metros, y preguntar a unos paseantes, por fin acabo de recorrer los campos de naranjos y comienza la senda marcada que nos llevará en poco mas de 2 km desde el nivel prácticamente del mar hasta cota cercana a 500 m. La senda es conocida como de los Amoladores, y son lazadas muy bien conservadas, con muretes de piedra de hasta dos metros de altura, en un camino que probablemente usarían los burros para bajar las piedras calizas para amolar desde el macizo al valle. En la foto se ve desde la zona de inicio donde se aparca el coche.
Una vez superada esta subida, se llega al Tozal de la Sangonera y se abre ante nosotros una gran planicie, que es un valle colgado con dirección completamente perpendicular a la costa y al valle de la Valldigna. Aquí hay varios cruces muy bien señalados, donde podemos ir dirección Norte al Puntal del Massalari y al Pico de la Ratlla, o tras varios cruces señalados llaneando e incluso un poco en descenso, tomamos ya dirección al alto de las tres cruces, a donde nos dirigimos y que tiene magníficas vistas. Hacia el norte se ve Cullera y toda la albufera, la llanura de Valencia capital y el cierre del arco en la zona de Puzol.
Hacia el Este se ve las playas de Tavernes, Xeraco y Gandía, y en días claros se ve claramente la isla de Ibiza. Yo no sé distingurila muy bien, pero en las rutas que hice en verano con gente local sí que me la señalaron claramente.
Y hacia el Sur y Oeste se ve todo el valle de la Valldigna, con Simat y Benifairó, y la población de Tavernes a nuestros pies.

Bueno, pues tras alcanzar la cima y hacer las fotos de rigor, quedan dos opciones, o volver sobre nuestros pasos, o hacer el descenso por el lado Este, lo que nos llevará de nuevo a Tavernes pero a la otra punta de la población. Como parece mas divertido que la salida sea circular, allá que nos vamos.
En esta zona no se pude ir muy rápido, ya que la senda es una sucesión de rocas calizas puntiagudas debido a la erosión alveolar de la arena de la playa, lo que deja un terreno muy inestable y duro duro. Vamos, que si te caes no te pinchas, casi te cortas.
Tras un kilómetro de descenso suave, giramos a la altura de las Fontetas de Cantús, para bajar ya dirección a Tavernes, otra vez por un escarpe muy pronunciado.
 Tras descender con cuidado, entramos en una zona boscosa donde se puede bajar mejor, y llegamos al canal de defensa de Tavernes, a la altura del inicio Este de la población. Toda la población de Tavernes está protegida de posibles desprendimientos del macizo calcáreo por un canal de defensa, con barreras estáticas y dinámicas, indicadoras del peligro que supone la caída de bloques. Una vez aquí, nos toca recorrer el canal de punta a punta hasta llegar al coche. Nos queda una salida muy maja y recomendable, de casi 10 km, que se puede hacer tranquilamente en 2 horas mas paradas.
En Agosto de este mismo año, el "sherpa" local Vicent, me llevó desde la ermita de San Lorenzo, primeramente por el PR-CV 39 hasta la Fuente de la Granata, subiendo por un fuerte repecho hasta la altiplanicie, almorzando en la Fuente de la Sangonera, tras lo cual llaneamos hasta el Tozal de la Sangonera, subiendo al Alto de las Tres Cruces, y bajando por las Fontetes de Cantús y de la Xarxa al canal de defensa de Tavernes, volviendo por el club de Tenis a subir a la ermita donde teníamos el coche.



miércoles, 8 de enero de 2014

Diciembre 2013: Corriendo sin rumbo.

Con un poco de retraso por las vacaciones navideñas, que en nuestro caso suponen recorrer 6 ciudades distintas en 15 días, por lo que te levantas de la cama y no sabes muy bien donde estás, voy a resumir lo que ha dado de sí el mes de cierra el año en cuanto al tema running.
El título de "corriendo sin rumbo" indica bien a las claras la falta de un objetivo concreto ni de metas ilusionantes, que no siempre se pueden o apetece tener, lo que hace que salgas a correr sin aliciente pero también es verdad que sin presión, corres cuando y como te apetece, te das cuenta de que vas mas lento que hace unos meses pero te da igual, sólo es correr por el mero placer de correr...bueno, y para no subir mucho de peso, cosa que con tantas lifaras es inevitable, pero así intentas minimizar el efecto báscula.

Entrando un poco en harina, los días 3 y 5 hago salidas por los Pinares de Venecia y alrededor del parque de atracciones, buscando algo de desnivel y a ritmos tranquilos de cinco cuarenta. La misma tarde del 5 paso por el Hospital para hacerme una sencilla intervención, pero que con el tema de los puntos y tal me dejará sin poder correr entre 10 y 15 días.

Con el reposo adecuado, el día 15 decido ya salir a hacer algo, quedo con Juanfran y damos una vuelta por los pinares, el cementerio y el Ikea, una horita muy muy tranquila, a seis, y bueno parece que está todo en su sitio.
La semana siguiente ya sí me propongo retomar la rutina de intentar salir 3 veces por semana, y como la empresa vuelve a darme "vacaciones", tengo algo mas de tiempo para dedicarle al tema.
El martes 17 hago 10,5 km de nuevo por los pinares, llegando hasta el cuarto cinturón, a ritmo cómodo de cinco cuarenta y pico.

- Tirada Camino de la Balseta 14 km: El viernes 17 decido coger el cinturón con el bidón, y hacer algo un poquito mas largo, que desde la maratón no he pasado de los 10 km. El día sale con bastante cierzo, por lo que tengo claro el recorrido. Cojo los pinares y el camino del tiro de bola dirección al vertedero. Es mas bien psicológico, pero el pasar el cuarto cinturón hace que parezca que la tirada es mas larga, si lo pasas has salido de Zaragoza, y si no, no.
Con el viento a favor subo tranquilo hasta el cruce con el CR-41, y allí hago paradita, gel y un par de fotos dirección al valle. Bajo por el camino que da hacia Puerto Venecia y el Ikea, donde el cierzo sí viene de frente, pero está algo resguardado por las laderas del vertedero. Al final completo los 14 km de rigor para poder llamarlo "tirada". He llegado a hacer este mismo recorrido hasta en 9 minutos menos, pero bueno, ahora es lo que hay.

Tras esta salida iniciamos el periplo navideño que nos lleva de lado a lado, así que a hacer la maleta con un par de mudas de correr, otro de "arreglao" y otro de "chandalero" y "palante". El domingo 22 hago 9,2 km por el canal desde La Cartuja, muy tranquilo pero algo durito del viernes. El martes 24 hago 7 km por los Pinares de Valdegurriana con las zapas de trail, salida que acorto porque me noto incómodo en los talones con ellas, hacía tiempo que no las llevaba. Esta zona de pinares es muy chula y variada, puedes alternar continuos toboganes, saliendo por el sur a la parte trasera de los barrancos, donde el paisaje es desértico.

- Senderismo Pinares de Valdegurriana 13,2 km: Como el día anterior me he quedado con ganas, el martes 25 decido hacer una salida a andar a ritmo vivo, metiendo desniveles y recorriendo completamente los pinares de la zona de Valdegurriana y el sureste de la ciudad de Zaragoza. Como ha llovido la noche anterior, opto de nuevo por las zapas de trail, y sí que acierto, porque hay zonas de yeso donde se te llenan de barro hasta mitad de la zapatilla. Lo malo es que entre esto y el aviso ya del día anterior, acabo con dos buenas ampollas en ambos talones. Otra cosa que no había tenido nunca y ahora empiezan a aparecer. 
Bueno, como iba comentando, salgo de La cartuja y al kilómetro ya me puedo meter por zona de pinares, cogiendo por la parte trasera de los barrancos, y haciendo continuamente toboganes. Voy por la linde sur del pinar, así luego a la vuelta me meteré por dentro y no hago el mismo recorrido. Vamos avanzando y llegamos a las inmediaciones del cuarto cinturón. Aquí subimos y bajamos un par de colinas de vertedero de inertes, hasta que salimos al puente peatonal que da acceso a Puerto Venecia. Cruzamos el cuarto cinturón, rodeamos el Ikea y bajamos por el Barranco de la Muerte hasta el final del cementerio. Allí cogemos por mitad del pinar y atravesamos de nuevo el cuarto cinturón por el marco existente, y seguimos por dentro del pinar, por donde intentaremos avanzar lo mas posibles sin salir ni por un lado al canal ni por el otro a la senda que marca por el sur el final de la zona boscosa.
Siempre por sendas o monte a través seguimos dirección este, haciendo toboganes, hasta que en un momento dado, no tenemos mas remedio que salir. Es la zona del parque de las esclusas de Valdegurriana, desde donde ya cogemos el canal y regresamos a La cartuja, completando 13,2 km en 1h51m, a ritmo por debajo de 8:30 m/km, que para ir andando no está nada mal.

Tras esta salida nos toca viajar a la Playa de Xeraco hasta la nochevieja, y pasar de correr con frío a clima muy templado. El viernes 27 hago 8 km a 5:25 m/km, llanitos pero con agua, que siempre correr al lado de la costa hace que la humedad aumente bastante. El domingo 29 decido hacer otra ruta senderista, esta vez al Alto de las 3 cruces de Tavernes, ruta que hice para el verano acompañado del "sherpa" local Vicent, pero esta vez subiendo por el zig-zag desde el mismo pueblo de Tavernes de la Valldigna. A esta ruta de haré mañana o pasado una entrada propia, es una zona que merece la pena rutear.

Finalmente el día siguiente, previendo que el 31 y 1 al ir a pasar la nochevieja a Herrera no podré salir, hago un regenerativo de 5,5 km por la zona de la playa, cerrando el mes de Diciembre con 79 km de running y 23 km de "andar a ritmo vivo".