sábado, 30 de noviembre de 2013

Descanso biológico

Resumen del mes de Noviembre de 2013:
Y es que después de tres años y pico, donde lo mas que había parado había sido una semana y por una gripe, tras la maratón y su posterior bajada paulatina de endorfinas durante el mes de Octubre, unido al repentino invierno, acrecentado en Zaragoza por el puñetero cierzo, han hecho que decida tomarme un descanso en el tema running.
No es que haya sido nada premeditado, simplemente así han venido los hechos. La momentánea vuelta al horario full-time de trabajo, un encargo de un estudio al que obviamente había que meterle cariño para tener continuidad, los catarros y virus de los niños, de los cuales consigues librarte pero que te dejan tocado, y la sensación continua de frío en el cuerpo, hacen que vayan pasando los días sin conseguir salir a correr en ninguno de ellos. 
Ya se te va pasando el hormigueo, los pies inquietos, simplemente no apetece.
Y en estas ves que llevas mas de 15 días seguidos sin correr, y se te ocurre pensar que tampoco pasa nada, que un parón biológico y psicológico del tema tampoco puede ser malo, que de todo hay que buscar el lado positivo.
En resumen, el día 8 hice 5 km rapiditos para mí, a 4:55 m/km, y el domingo hice 9 km con Juanfran, tranquilo pero ya pidiendo la hora. Tras estos dos días vino el cierzo y el frío, y hasta el 28 nada de nada. El 28 hice 7 km y hoy día 30 5,5 km, pero en ambos dos días sufriendo para mantener ritmos de 5:40 m/km. Uff, sólo de pensar que hace dos meses hacía tiradas de 20 km sin mucho esfuerzo, y ahora a los 10 minutos voy ya con la soga... bueno, iremos recuperando poco a poco.
Añado un extracto de un artículo que he encontrado del tema de descansos y las pérdidas de forma que eso conlleva:

Los deportistas de élite tienen descansos biológicos de regeneración...no lo vamos a tener los aficionados. La teoría es bajar el entrenamiento casi hasta cero, para luego comenzar de nuevo con la curva de rendimiento. ¿Pero qué ocurre cuando dejamos de entrenar?. He encontrado varias referencias vía internet de la pérdida progresiva de condiciones físicas con el paso de los días, para que cada cual vea cómo programar estos descansos de forma adecuada para no perder mucho.
Corazón: A partír de los 21 días el ventrículo izquierdo se reduce entre un 5 y un 20 %, lo que se traduce en un menor volumen de sangre impulsada en cada latido, y un aumento del número de pulsaciones. En dos semanas, el volumen de sangre por latido puede disminuir mas del 10 %, las pulsaciones en reposo aumentar hasta un 7 % y las máximas hasta un 10 %.     
Consumo de Oxígeno (VO2max): Hasta los 10 días no se empieza perder potencial, y luego se pierde progresivamente hasta que a las seis semanas se estabiliza acorde a tu condición genética.
Depósitos de Glucógeno: Descienden paulatinamente durante tres semanas hasta estabilizarse en valores de una persona no entrenada, debido a que la enzima que sintetiza la glucosa se reduce hasta en un 40 %.
Masa Muscular: Desciende paulatinamente durante tres semanas desde el 1 al 5 %, con la reducción de la fuerza asociada. Los vasos capilares que irrigan los músculos pierden un 6 % de densidad en 15 días, y la relación peso/potencia disminuye hasta un 10 % en dos semanas. El colesterol perjudicial aumenta a partir de las dos semanas hasta un 10 %.

Lo ideal en esta época de descanso es hacer algo de entrenamiento cruzado, o fortalecer la musculatura en el gimnasio, lo cual, además de limitar estas pérdidas, puede resultar muy beneficioso para la posterior puesta en marcha. Y si a esto añadiéramos un entreno corto a la semana, para recordarle a los músculos que seguimos allí, lograríamos minimizar las pérdidas reseñadas. Con esto se concluye que el parón máximo debería ser de 10 días, pero claro, esto es para los "profesionales"...